Las aguas termales al aire libre son una experiencia increíble, especialmente con vistas a las montañas cubiertas de nieve.

El tamaño de las habitaciones puede resultar un poco pequeño para aquellos que buscan más espacio.

El balcón de la casa ofrece vistas impresionantes del valle y la cordillera del Puigmal. Disfruté cada momento de tranquilidad y descanso. Luis y Mónica se esforzaron por hacerme sentir como en casa, siempre atentos.

Un poco más de espacio en la habitación sería ideal.

El lugar es perfecto para disfrutar en familia, con habitaciones impecables y comidas deliciosas. Mónica y Luis se volcaron en hacernos sentir como en casa, y los baños de Dorres a solo 200 metros fueron un gran plus para relajarnos después de un día de aventura.

A mis hijos les hubiera gustado más espacio en la habitación.

Una escapada perfecta

Pasamos un fin de semana increíble con amigos. La casa tiene un encanto especial y las vistas son espectaculares. La comida es de 10, especialmente el desayuno lleno de productos frescos. Solo nos hubiera gustado un poco más de espacio en el área común, pero la tranquilidad del jardín lo compensa todo.

Las vistas son increíbles, aunque faltaba un refrigerador en la habitación.

Pasamos unos días maravillosos, disfrutando de la sauna y de las aguas termales, un verdadero relax. El jardín es genial para tomar el sol y desconectar un rato. Aunque las habitaciones son un poco pequeñas, eso no arruinó nuestra experiencia. ¡recomendaría llevar algo ligero para picar!

Fue una elección de primera para unas vacaciones en la ciudad en Dorres con una buena relación calidad-precio. Las cenas eran espectaculares, especialmente la variedad de postres caseros que ofrecían. Si te gusta la naturaleza, no olvides visitar los baños termales, son un must.

La estancia fue muy agradable, con anfitriones que realmente se preocuparon por nosotros, brindándonos una experiencia cálida y comida deliciosa. Las vistas al Puigmal y el valle de la Cerdanya son impresionantes, aunque el tamaño de las habitaciones podría ser un poco pequeño para algunos. Sin duda, es un lugar ideal para desconectar y disfrutar de la naturaleza.

pasamos un fin de semana tranquilo en dorres y la experiencia en el balcó de dorres superó nuestras expectativas. la cabaña era acogedora y todo estaba muy limpio, los desayunos eran deliciosos, especialmente los croissants y embutidos. además, la amabilidad de luis y mónica hizo que nos sintiéramos como en casa.

faltaba nevera en la habitación.

Estuvimos en un lugar idílico, la casa es acogedora, todo limpio y con unas vistas que quitan el aliento. ¡Luis y Mónica son unos anfitriones encantadores que te hacen sentir en casa!

El baño olía un poco a humedad, pero no quise hacer un drama, ¡casi parece parte del encanto!

En El Balcó de Dorres, el desayuno fue una delicia con croissants frescos y embutidos locales que nos dejaron pidiendo más. La cabaña tiene un encanto especial, ideal para desconectar y disfrutar del silencio. Además, la atención de Luis, siempre amable y dispuesto, hizo que nos sintiéramos como en casa.

Si bien las habitaciones son pequeñas, eso no impidió que disfrutáramos al máximo. Solo un pequeño detalle, la falta de nevera, que hubiera sido útil para nuestra perra, pero al final, todo brilló.

La estancia en El Balcó de Dorres fue simplemente encantadora. La cabaña tiene un ambiente acogedor y todo estaba impecablemente limpio. Luis y Mónica se entregan por completo, siempre atentos a cualquier necesidad. El desayuno es una delicia, con croissants frescos y embutidos locales que te dejan con ganas de más. La ubicación es ideal para explorar la naturaleza, y las aguas termales a solo 300 metros son un verdadero plus. El único inconveniente es el tamaño de las habitaciones, que podrían ser un poco pequeñas para quienes buscan más espacio. Además, la ausencia de un refrigerador en las habitaciones es algo a considerar, especialmente si necesitas conservar comida. La tranquilidad del lugar realmente te permite desconectar y disfrutar del paisaje. Sin duda, volvería a repetir la experiencia.

Desayuno generoso y buenas vistas, pero el wifi era un poco lento.

vistas impresionantes desde el balcón

limpieza impecable, desayuno abundante

olor ligero en el baño